Datos curiosos

Llevo más de una semana en la residencia y para mí es como si ya hubiera pasado una eternidad (topicazo que ha resultado ser cierto en mi caso). Los horarios de las comidas son una ayuda, la verdad, porque en cierta forma te fuerzan a adaptarte. Si estuviera en un piso, por ejemplo, lo más probable es que imitara las costumbres que yo tenía en Murcia (como, por ejemplo, mi tiempo de leer, de jugar a la DS o de estar en el ordenador), algo que a la larga es perjudicial porque precisamente al recrear aquello que hacía en Murcia la echaría más de menos. Aquí tengo que acostumbrarme a aquí.

A parte de esta apreciación, me gustaría aprovechar esta entrada para comentar algunas de las cosas que me han pasado durante esta semana:

-Mi facultad está a 30 minutos (a paso medio-rápido) de la residencia. Pros: tiempo para leer y para pensar (¿? xD); contras: todavía hace calor y el contraste con el aire acondicionado de las clases hace que sude al llegar xDD.

-Ya conozco a "bastante" (bastante para mí, para otra gente seguramente poca) gente, tanta en la residencia como en la facultad. Lo malo es que la chica que mejor me cae en la Universidad no va a mi clase T.T

-El director, rector o como se quiera llamar de la EIAE es un clon mentalmente hablando del del equipo directivo del IES Alfonso X: los mejores sobre los mejores. La mejor escuela, la mejor promoción.. ¡Bah! Modifico un poco lo que susurró Patricia (la chica esta que no va a mi clase): ¡Cómprate una abuela!

-Mi residencia es un viejo bloque de edificios reformado, aunque todavía sigue viviendo gente en algunos pisos. Bien, una de esas vecinas tiene un perro tan grande y tan gordo que se confunde con una oveja pelada (a mi padre también le pasó).

-Cuando fui a comprarme una mochila vi una que me gustaba pero que no tenía etiqueta. Se lo pregunté a la dependienta y, tras varios intentos infructuosos por su parte me dijo que costaba 40€. Digo infructuosos porque cuando fui a pagar en realidad costaba 19 xD.

-De vez en cuando en mi cuarto se filtra un tufillo a baño (entiéndase qué parte del baño). Lo curioso es que yo no dispongo de váter, y el común está a una vuelta de pasillo y 6-7 metros, por lo menos. Sinceramente, no quisiera compartir lo que fuese con el dueño de ese estómago.

-Se supone que los novatos estamos para servir a los veteranos y dejar que nos hagan putadillas (o putadas a secas). A mí no me da la gana, así que me han amenazado un par de veces con la ducha. De momento me baño sólo cuando quiero, aunque veté tú a saber si esperan un descuido por mi parte (nah.. parecen buenos chicos :D, en serio xDD). Por si acaso, seguir las instrucciones de Ojoloco Moody.

En cuarto de hora saldré hacia la Universidad. Toca preparar la mochila.